Teatro y educación profesional

    

     En la generación de mis padres y mis abuelos se consideraba a la educación como el principal motor de la movilidad social y el medio más seguro para que un mexicano pudiera asegurarse un lugar digno entre la población económicamente activa de nuestro país. Evidentemente estoy refiriéndome al siglo pasado, es decir, al siglo XX, en el cual una buena educación —entiéndase educación universitaria— era altamente valorada por la sociedad. En aquellos tiempos —hoy lejanos— quien lograba terminar una carrera universitaria formaba parte de un selecto grupo, que en el imaginario colectivo era digno de respeto. Pero, además, se aseguraba una estabilidad económica y un lugar en la clase media mexicana.

     En una de las obras paradigmáticas del teatro mexicano, Los signos del zodiaco, Sergio Magaña encierra en una vieja vecindad de la Ciudad de México a un grupo de personajes que parecen representar a la sociedad de su momento. El rasgo común de todos ellos es la pobreza y la aspiración general a salir de la vecindad que - siguiendo con la lógica simbólica - representaría la miseria. Resulta interesante que aunque todos quieren salir, muy pocos lo logran, y que el motor para ello es un personaje: Pedro Rojo, un estudiante universitario. Así las cosas, podríamos leer en la obra de Magaña - entre otras ideas - una defensa de la educación como el camino para salir de la miseria.

     A pesar del tiempo transcurrido desde el estreno de Los signos del zodiaco, la eficiencia terminal educativa no ha mejorado mucho. En un reporte del Panorama de Educación de la OCDE del 2015, se dice que sólo el 18% de los estudiantes mexicanos se titula de una carrera universitaria; un 4% logra concluir una maestría y apenas el 1% alcanza el grado de doctor.



     En el ámbito del teatro, la situación es ligeramente diferente. En los últimos 10 años ha habido un ligero crecimiento en lo referente a la profesionalización de los estudiantes de teatro y actuación. En 2006 había 14 universidades que ofrecían una licenciatura en estas áreas, para 2015 la oferta había crecido hasta tener 25; también se habían abierto 6 maestrías y 1 doctorado relacionados directamente con el teatro. Es muy posible que en la actualidad (2017) esta lista ya se haya modificado pero en mi última revisión de datos, el mapa de licenciaturas y universidades con oferta teatral estaba configurada de la siguiente manera:

1. Universidad Autónoma de Chihuahua (Licenciatura en Teatro. Maestría en Artes)

2. Universidad Autónoma de Puebla (Licenciatura en Arte Dramático. Taller de Teatro Infantil)

3. Universidad Autónoma del Estado de Morelos (Licenciatura en Teatro)

4. Centro Morelense de las Artes. Instituto de Cultura de Morelos (Licenciatura en Teatro. Maestría en Pedagogía del Arte)

5. Universidad Nacional Autónoma de México (Licenciatura en Literatura Dramática y Teatro. Teatro para Niños)

6. Centro Universitario de Teatro (Licenciatura en Teatro y Actuación)

7. Universidad Autónoma de Nuevo León (Licenciatura en Arte Teatral)

8. Casa del Teatro (Licenciatura en Actuación)

9. Universidad Veracruzana (Licenciatura en Teatro. Licenciatura en Educación Artística. Maestría en Artes Escénicas)

10. Escuela Superior de Artes de Yucatán (Licenciatura en Teatro)

11. Universidad Autónoma del Estado de México (Licenciatura en Artes Teatrales)

12. Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (Licenciatura en Teatro. Doctorado Interinstitucional en Arte y Cultura: Aguascalientes, Guadalajara, Guanajuato)

13. Universidad de las Américas Puebla (Licenciatura en Teatro)

14. Universidad de Londres (Licenciatura en Actuación)

15. Universidad Anáhuac México Norte (Licenciatura en Teatro y Actuación)

16. Universidad Autónoma de Aguascalientes (Licenciatura en Artes Escénicas: Actuación)

17. Universidad de las Artes. Instituto Cultural de Aguascalientes (Licenciatura en Teatro)

18. Universidad de Guadalajara (Licenciatura en Artes Escénicas para la Expresión Teatral. Optativas: Elaboración y animación de muñecos teatrales; Taller de Títeres; Manejo de zancos y coturnos. Maestría en Educación y Expresión para las Artes. Doctorado Interinstitucional en Arte y Cultura)

19. Universidad de Guanajuato (Licenciatura en Artes Escénicas. Maestría en cultura y Arte. Doctorado Interinstitucional en Arte y Cultura)

20. Escuela Nacional de Arte Teatral (Licenciatura en Actuación. Maestría en Dirección Escénica)

21. Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (Licenciatura en Arte Dramático)

22. Universidad Autónoma de Sinaloa (Licenciatura en Teatro)

23. Universidad Autónoma de Querétaro (Licenciatura en Artes Escénicas: Actuación. Licenciatura en Docencia del Arte)

24. Universidad de Sonora (Licenciatura en Arte Escénicas: Actuación)

25. Universidad Autónoma de Baja California (Licenciatura en Teatro)

      Estos datos nos muestran que en lo referente al teatro, hay una clara tendencia hacia la profesionalización, es decir, hay un crecimiento en la demanda de educación superior para los aspirantes a actores, directores, dramaturgos, productores, promotores, críticos e investigadores. Si analizamos el fenómeno, podemos ver que  el área que mejores perspectivas presenta hoy  es la academia, es decir, profesores de teatro altamente capacitados con maestría o doctorado para cubrir la demanda universitaria que el renovado interés en esta disciplina artística está creando.

    

     En todo caso, cuando la situación de la economía es tan incierta como en la actualidad, parece que la idea de que la educación es el mejor camino para salir de la estrechez económica, resurge en muchos sectores de la sociedad, y uno de ellos es el teatro.

*****

Conoce más del autor en:
Amazon.com

Academia.edu

Dramaturgia Mexicana

Spotify

iVoox

Instagram